lunes, 14 de diciembre de 2009

Telemadrid y aquello tan banal de "la ética"

TELE MADRID COMPARA LA MANIFESTACIÓN DE LOS SINDICATOS CON LAS MARCHAS DE APOYO A FRANCO

Es tan vergonzoso e indigno que hechos así le dejan a uno sin palabras y con la boca abierta. Telemadrid, un canal público que en teoría debía de estar al servicio de todos los madrileños, da una muestra más de hasta dónde se puede caer en la defensa de los intereses políticos a los que sirve sin pudor ni disimulo algunos. La "cobertura", si es que se puede llamar así al ejercicio demagógico y desprovisto de toda ética profesional que el programa "Siete Días" realizó para hablar de la manifestación sindical, ni siquiera ofreció una sola imagen real de la misma, sino que se limitó a emitir imágenes de la dictadura para criticar el hecho de que los sindicatos hubieran puesto "un tren gratuito" desde Albacete y una gratificación en forma de "media dieta" para poder almorzar en Madrid. Otro ejemplo: ni dos minutos dedicó el Telenoticias 3 a informar de la marcha, y más de siete a criticar a los sindicatos convocantes.

Insisto, hablamos de la televisión pública, la de todos los madrileños y madrileñas, que una vez más (y ya son ciento) deja de lado aquello tan banal de la ética para erigirse en un órgano propagandístico de las mentiras del PP. Y traspasa los límites que el "NO-DO" franquista puso en su día, ya que al menos aquello era una dictadura de verdad. Ahora vivimos en una democracia donde la libertad de expresión (artículo 20 de la constitución) y el derecho a la información veraz son prostituídos a la pronta orden de la lideresa, sin tapujos ni cortapisas.

La verdad es que aún me sorprende cuánto cabrea a esta ultraderecha que los sindicatos puedan manifestarse sin tener que por ello atacar al Gobierno, culpable, como todo el mundo sabe, de cuanto acontece bajo el sol. Una marcha que constituía una llamada de atención para que cualquier reforma laboral no se haga, como siempre, a costa del trabajador. Hace falta un nuevo modelo pero eso no debe implicar mayor desprotección social, y quizá quizá es por ello que no se manifestaron contra el ejecutivo de Rodríguez Zapatero: porque además de cuantas medidas estructurales se han tomado para intentar paliar los efectos de la crisis, las coberturas sociales han permanecido, y permanecerán, intactas.

Estas técnicas desinformativas tan características del PP son (y que nadie se escandalice) propias de regímenes fascistas como aquél que un tal Hitler llevó a cabo en la Alemania de los años 30. Goebbles, ministro de propaganda nazi, estaría orgulloso de ellos.

Tanto CCOO como UGT han pedido el cese de la directora general de TM3, Isabel Linares, y estudiarán llevar el caso a los tribunales. Pero es obvio que Aguirre no tomará esta decisión, ni ninguna otra, contra quien no es sino su perrito faldero y que ha demostrado tan poca ética como ella. ¿Apostamos?

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